Para el decapado, es mejor elegir uvas blancas, densas, no demasiado maduras, en primer lugar, para que conserve mejor su forma y, en segundo lugar, las bayas blancas no colorearán la salmuera. Y si elige bayas y tomates de tamaño similar, se calentarán de la misma manera y absorberán uniformemente la sal y el sabor de las especias.